Si eres padre o madre, seguro que buscas constantemente formas de proteger a tus hijos y te aseguras de que crecen sanos y felices. A menudo puede ser una tarea difícil, sobre todo cuando se trata de pantallas y tecnología. Muchos de nosotros dependemos de las pantallas para trabajar o entretenernos, pero las investigaciones demuestran que la sobreexposición de pantallas a los más pequeños puede tener consecuencias negativas para ellos.
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Con el uso generalizado de dispositivos digitales y la presencia constante de pantallas en nuestras vidas, los niños pequeños están cada vez más expuestos a ellas.
Es importante que los adultos comprendan que demasiado tiempo frente a una pantalla, sobre todo a una edad temprana, puede tener graves consecuencias negativas en el desarrollo del niño. Una exposición excesiva a la tecnología a una edad temprana se ha relacionado con trastornos del desarrollo como el TDAH y la falta de habilidades sociales. Además, puede afectar a los patrones de sueño e incluso reducir los niveles de actividad física.
Por lo tanto, los adultos deben reconocer la necesidad de un consumo equilibrado de los medios de comunicación para que los niños puedan adquirir todos los beneficios asociados con el uso de la tecnología, limitando al mismo tiempo los riesgos asociados.
En los tiempos que corren, es muy tentador dar a los niños pequeños acceso a las pantallas para entretenerlos. No negamos que el uso controlado de dispositivos como ordenadores y teléfonos inteligentes tiene sus ventajas. Sin embargo también es importante recordar los peligros asociados a un exceso de pantalla a los más pequeños.
Con un tiempo excesivo frente a un móvil u ordenador, los niños pueden estar expuestos a contenidos inapropiados. Además de desconectarse de las señales sociales de aprendizaje, tener dificultades para concentrarse en las tareas, y experimentar trastornos del sueño.
Todos estos efectos pueden repercutir gravemente en el desarrollo y el bienestar a largo plazo del niño. Así que apúntate los tips que te vamos a dar a continuación, ya que es esencial proteger a los más pequeños del uso excesivo de las pantallas.
Limitar la exposición a las pantallas es una de las cosas más importantes que los padres pueden hacer para promover un desarrollo saludable en los hijos.
Los estudios demuestran que el uso de pantallas podrían ayudar a facilitar el desarrollo del lenguaje y las habilidades cognitivas en los niños pequeños, si su uso no fuese continuado y excesivamente prolongado en el tiempo. Los padres deben asegurarse de que sus hijos no pasen demasiado tiempo frente a las pantallas, sustituyendo así las interacciones significativas con compañeros o familiares. Las investigaciones sugieren que limitar la exposición a las pantallas permite a los niños desarrollar mejores habilidades de resolución de problemas y mejora la autodisciplina, así como la regulación emocional, dándoles un mejor comienzo para crecer y convertirse en adultos seguros de sí mismos.
Además les dan la oportunidad de participar en actividades como contar cuentos, leer juntos o jugar al aire libre. Actividades que fomentan el vínculo entre padres e hijos a la vez que ayudan a que el aprendizaje vaya más allá de los ordenadores.
Criar a un niño pequeño en la era de las pantallas puede ser complicado. Si crees que el tiempo que pasa frente a la televisión se le está yendo de las manos, es momento de tomar algunas medidas.
Una de las mejores formas de abordar este problema es establecer límites claros sobre cuándo y dónde se puede ver una película. Por ejemplo, estableciendo que los deberes del colegio deben hacerse siempre sin conexión. O permitiendo el tiempo con el ordenador sólo después de haber completado ciertas actividades, como jugar al aire libre o las tareas domésticas.
Además, es recomendable establecer momentos a lo largo del día en los que todos los dispositivos electrónicos estén prohibidos. Por último, asegúrate de ofrecer a los niños pequeños actividades atractivas para que puedan seguir divirtiéndose sin recurrir a un dispositivo.
Al fin y al cabo, está claro que las pantallas y la tecnología pueden tener efectos tanto positivos como negativos en los niños pequeños. Pero si somos conscientes de estos riesgos y tomamos medidas, podemos ayudar a fomentar un crecimiento sano y garantizar la integridad de los niños. Así que toma nota y protege a tus hijos de los peligros que pueden ocasionar las pantallas a los más pequeños.
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