¿Has oído hablar alguna vez de la caléndula? Flor autóctona de Europa con una historia rica y vibrante, la caléndula es la aliada perfecta para mantener tu piel con el mejor aspecto. Mucho antes de los productos modernos para el cuidado de la piel, la caléndula se utilizaba mucho en la medicina tradicional como remedio contra la inflamación y la sequedad, ¡por lo que sigue siendo eficaz hoy en día!
En esta entrada del blog, exploramos los maravillosos beneficios y propiedades de la caléndula que la convierten en un ingrediente increíble para tener en cualquier hogar. Sigue leyendo para saber por qué la caléndula debería convertirse en uno de tus ingredientes imprescindibles para el cuidado de la piel.
Tabla de contenidos
¿Qué es la caléndula y de dónde viene?
La caléndula es una flor con pétalos brillantes de color amarillo anaranjado, de formas y tamaños muy variados. Las flores se suelen utilizar en infusiones y ungüentos para el cuidado de la piel. Originaria del sur de Europa y de la región mediterránea, la caléndula era apreciada por sus propiedades curativas por las civilizaciones antiguas, incluidos griegos y romanos.
Hoy en día, esta hierba se cultiva en todo el mundo, tanto en huertos como en campo abierto. Sus usos versátiles la han convertido en un aditivo botánico excelente para muchos productos para el cuidado de la piel. Y es que la caléndula puede actuar como ingrediente antiséptico, antifúngico y antiinflamatorio, lo que la convierte en una adición bienvenida a muchos jabones, cremas, ungüentos y lociones.
¿Cómo se prepara una infusión?
Una vez que tengas las hierbas, la infusión de caléndula es increíblemente sencilla de hacer. Todo lo que se necesita son unas cuantas flores de caléndula y un poco de agua. Aunque se puede disfrutar sola, una infusión hecha con otras hierbas como hojas de diente de león, hojas de boldo y menta tiene el potencial de aportar aún más beneficios en cuanto a sabor y valor nutritivo.
Para prepararla, basta con hervir las hierbas mencionadas con un poco de agua y dejarla en infusión durante 10 minutos antes de colarla. Quizá quieras añadir un poco de miel para endulzar la infusión, ya que a veces puede tener un sabor bastante amargo. Con un esfuerzo mínimo y una recompensa máxima, esta bebida calmante puede ayudar a cualquier persona a encontrar una sensación de paz durante el día.
Ayuda a combatir problemas de la piel
La caléndula es una hierba asombrosa con propiedades increíbles que pueden ayudar a nuestra salud. Tiene propiedades antisépticas, antiinflamatorias y analgésicas que ayudan a curar cortes y rozaduras, así como infecciones fúngicas como el pie de atleta. También relaja los espasmos musculares y rejuvenece las células de la piel, ayudando a reducir el aspecto de las cicatrices y a tratar el acné, el eccema y las úlceras bucales.
Esta planta es capaz de retener la humedad, aliviando la sequedad de la piel y las grietas provocadas por el clima invernal o la exposición al sol. Como resultado, es una opción perfecta para devolver la elasticidad a la piel expuesta a ambientes o temperaturas duras.
La caléndula alivia el picor de ojos
Esta planta está repleta de provitamina A y potentes compuestos antioxidantes que ayudan a proteger los ojos contra cualquier degeneración debida al envejecimiento o a la exposición a la luz solar. Por ello, la caléndula puede ser útil para las personas que tienen problemas de visión nocturna o hábitos perjudiciales para la vista.
Además, el potente contenido vitamínico de la planta ayuda a prevenir enfermedades relacionadas con la edad, como las cataratas y la degeneración macular. Todos estos beneficios hacen de la caléndula un activo especialmente valioso para quienes desean mantener sus ojos sanos y fuertes.
La caléndula frente los problemas digestivos
Desde las ensaladas hasta las sopas, la caléndula es un ingrediente que puede hacer que una comida sea más agradable y beneficiosa. Con efectos coleréticos que estimulan la salida de la bilis hacia el tubo digestivo, desempeña un papel importante para facilitar la digestión. Por otro lado también puede ayudar a quienes sufren dolencias como la gastritis o vómitos. Tomar una infusión de caléndula es una solución sencilla pero eficaz para cuidar tu salud digestiva.
Soluciones naturales con caléndula: guía para una piel sana
Está claro que la caléndula ofrece una amplia gama de beneficios para el cuidado de la piel. No sólo puede reducir problemas cutáneos comunes como el enrojecimiento, la sensibilidad y las arrugas, sino que también añade un nivel de hidratación y rejuvenecimiento a la piel. Así que si quieres ayuda para luchar contra un problema cutáneo ¡aprovecha las maravillas de la caléndula! Como siempre, recuerda visitar nuestro sitio web No Te Lo Pierdas para obtener más consejos y trucos saludables.
